En el epicentro de Los Ángeles, donde los Lakers han sido sinónimo de gloria eterna en la NBA, un terremoto sacude la parte interna: el nuevo propietario irrumpe con tijeras afiladas, despidiendo a pilares de la era Buss y diezmando el scouting. Con un equipo que sueña con anillos y un mercado de 10.000 millones en juego, estos movimientos prometen un renacer o un abismo. ¿Es el fin de una dinastía familiar o el comienzo de una era implacable? La respuesta redefine el futuro púrpura y oro.
La purga inicial: Despidos que marcan territorio
Mark Walter, el magnate que compró la mayoría de los Lakers por 10.000 millones de dólares en junio y vio aprobada la transacción por la NBA el 30 de octubre, no ha perdido tiempo en imponer su sello. El jueves 20 de noviembre, la franquicia anunció la reestructuración de operaciones de baloncesto, despidiendo a Joey y Jesse Buss, hermanos de Jeanie Buss y ejecutivos clave durante dos décadas. Joey, de 41 años, era gobernador suplente y vicepresidente de investigación y desarrollo, además de presidente de los South Bay Lakers en la G League.
Jesse, de 37, se desempeñaba como subdirector general y director de scouting, influyendo en drafts y fichajes. Ambos, hijos del legendario Jerry Buss quien adquirió el equipo en 1979 por 67,5 millones, contribuyeron a éxitos como el descubrimiento de Austin Reaves, Kyle Kuzma, Jordan Clarkson, Larry Nance Jr. y Max Christie. Sin embargo, fallos recientes en picks del draft como Jalen Hood-Schifino (17º en 2023) y Dalton Knecht (17º en 2024) precipitaron el cambio. Los hermanos retienen acciones minoritarias, pero su salida operativa cierra un capítulo familiar que duró 46 años, el más largo en la NBA.
Pero, esto no paró ahí: la mitad del staff de scouting fue despedida, incluyendo a Sean Buss (hermano por parte de madre), Aaron Jackson, Moses Zapata y Can Pelister. Los Lakers, con uno de los departamentos más reducidos de la liga, ahora operan con un esqueleto mínimo hasta reclutamientos nuevos. Walter, inspirado en su éxito con los Dodgers, campeones de Serie Mundial en 2020, 2024 y 2025, ve en esto una oportunidad para inyectar eficiencia. “Todo se evalúa”, filtró una fuente cercana, señalando que el proceso evitó esperas innecesarias. Jeanie Buss, hermana mayor y actual gobernadora, sobrevive como única Buss en el organigrama ejecutivo, representando al equipo en juntas de la NBA por al menos cinco años más.
El éxito de Walter: De Dodgers a Lakers, un modelo probado
Walter no es un novato en franquicias: desde 2012, como dueño mayoritario de los Dodgers adquiridos por 2.000 millones, transformó un equipo irregular en dinastía, con 13 playoffs seguidos, tres Series Mundiales y el gasto más alto en béisbol. Su fórmula: potenciar analítica, nutrición para jugadores de ligas mayores y menores, y casas club con tecnología de vanguardia en fisioterapia. Ahora, aplica lo mismo a los Lakers, priorizando scouting y desarrollo sobre gastos.
El nuevo dueño, CEO de Guggenheim Partners y con stakes en Sparks (WNBA), Chelsea FC y el equipo Cadillac de Fórmula 1, valora la sostenibilidad. “Los Lakers son una plataforma global para inspirar rendimiento y comunidad”, declaró postaprobación. Fuentes indican que Walter explora alianzas con su red, incluyendo datos de TWG Global para analizar proyecciones. Para los Lakers, 11-4 y cuartos en el Oeste impulsados por Doncic (34,6 puntos, 9 asistencias), estos cambios llegan en momento óptimo.
Por otro lado, Joey y Jesse lamentaron: “Ojalá pudiéramos preguntar a papá qué pensaría”. Jeanie, con 15% minoritario, navega el limbo, mientras Walter celebra su Serie Mundial con Dodgers (back-to-back 2024-2025) y afirma: “Aún no termino de festejar este año”, insinuando las ambiciones de los Lakers. Para algunos fans, estos cambios pueden ser agridulce: adiós a una era, hola a un futuro que promete. En la NBA, donde dinastías nacen de visiones, Walter apuesta por la suya.
Freddy Díaz, nacido en Caracas, Venezuela, es un apasionado del deporte con 5 años de experiencia en creación de contenido, redacción de noticias, editoriales y pronósticos deportivos. Especializado en baloncesto, disciplina que practica desde los 8 años, vive y siente el deporte como parte esencial de su vida. Su conocimiento práctico y analítico lo convierten en una voz autorizada, combinando experiencia en la cancha con una sólida trayectoria en el mundo del periodismo y análisis deportivo.
