En el vibrante mundo del deporte, pocas historias capturan la imaginación como la de Pável Podkolzin. Este coloso ruso, conocido por su paso por la NBA con los Dallas Mavericks, ha desafiado todas las expectativas al debutar como futbolista profesional a los 40 años. Con sus imponentes 2.26 metros, Podkolzin se ha convertido en el jugador más alto en la historia del fútbol, marcando un hito en la Copa de Rusia. ¿Cómo logró este exjugador de la NBA reinventarse en un campo completamente nuevo?
De las canchas de la NBA a los campos de fútbol
Pável Podkolzin irrumpió en la NBA en 2004, cuando los Utah Jazz lo seleccionaron en la primera ronda del draft (pick 21), antes de ser traspasado inmediatamente a los Dallas Mavericks. Su paso por la liga fue breve, disputando solo seis partidos entre 2004 y 2006, donde anotó 4 puntos y capturó 9 rebotes. A pesar de su limitada participación, su altura de 2.26 metros lo colocó como el séptimo jugador más alto en la historia de la NBA, empatado con Chuck Nevitt y Sim Bhullar. Su condición de acromegalia, un trastorno hormonal que afecta el crecimiento, contribuyó a su impresionante estatura, pero también limitó su agilidad en el baloncesto.
Tras su salida de la NBA en 2006, Podkolzin regresó a Rusia, donde jugó en equipos como el Khimki antes de retirarse del baloncesto en 2019. Sin embargo, su pasión por el deporte no se desvaneció. En un giro inesperado, el presidente del Amkal Moscú, un excompañero de Podkolzin en una liga local de baloncesto, lo convenció para probar suerte en el fútbol. Su debut el 19 de agosto de 2025 en la Copa de Rusia contra el FC Kaluga marcó un antes y un después, no solo por su participación, sino porque estableció un nuevo récord mundial como el futbolista más alto de la historia, superando a Simon Bloch Jorgensen (2.10 metros).
Un debut histórico que cautivó al mundo
El debut de Podkolzin con el Amkal Moscú, un equipo de la séptima división rusa, fue un espectáculo que captó la atención global. El ruso, de 40 años, tuvo que agacharse para atravesar el túnel hacia el campo, destacando su colosal presencia frente a compañeros y rivales. Durante el partido, que terminó con una victoria 1-0 para Amkal gracias a un gol de David Papikyan, Podkolzin jugó como delantero centro, aprovechando su altura en duelos aéreos. Aunque no marcó, estuvo cerca de anotar en un remate que fue detenido por el portero rival. “Tienen un gran portero. Lo intentaré de nuevo en el próximo partido”, declaró Podkolzin.
Su presencia en el campo no solo rompió récords, sino que generó revuelo en redes sociales, destacaron la magnitud de su debut. El impacto visual de Podkolzin, 18 centímetros más alto que el travesaño de la portería, convirtió su debut en un fenómeno viral. Este hito no solo resalta su versatilidad atlética, sino que también plantea preguntas sobre la capacidad de los atletas para adaptarse a deportes completamente diferentes. La transición de Podkolzin de la NBA al fútbol profesional es un testimonio de su determinación. El fútbol requiere habilidades distintas al baloncesto, como el control del balón y la agilidad, donde la altura puede ser tanto una ventaja como un obstáculo.
Sin embargo, Podkolzin demostró su valía al contribuir en tareas defensivas y ofensivas, incluyendo una despeje en su área. A sus 40 años, Podkolzin no solo ha roto récords, sino que ha inspirado a una nueva generación de atletas. Su próximo partido con Amkal será el 9 de septiembre contra Salyut-Belgorod en la Copa de Rusia, una oportunidad para consolidar su lugar en el fútbol. “Es una gran oportunidad estar en este deporte. Estoy agradecido”. Su historia, desde las canchas de la NBA hasta los campos de fútbol, es un recordatorio de que el talento y la pasión no tienen límites, sin importar la edad o las circunstancias.
Freddy Díaz, nacido en Caracas, Venezuela, es un apasionado del deporte con 5 años de experiencia en creación de contenido, redacción de noticias, editoriales y pronósticos deportivos. Especializado en baloncesto, disciplina que practica desde los 8 años, vive y siente el deporte como parte esencial de su vida. Su conocimiento práctico y analítico lo convierten en una voz autorizada, combinando experiencia en la cancha con una sólida trayectoria en el mundo del periodismo y análisis deportivo.
