
Chris Paul, uno de los bases más influyentes de las últimas dos décadas, fue el centro de atención en las noticias NBA tras el anuncio de este sábado que la temporada 2025-26 será la última de su carrera en el mejor baloncesto del mundo. El veterano de 40 años comunicó su decisión a través de sus redes sociales acompañado de un video con highlights y un mensaje de gratitud por “esta última” etapa de su carrera.
Trayectoria y cifras que explican el peso de su salida
Desde que fue seleccionado cuarto en el draft de 2005, Chris Paul ha sido parte de las noticias NBA construyendo un palmarés que lo instala sin discusión entre los grandes bases de la historia: 12 selecciones al All-Star, 11 designaciones All-NBA, nueve apariciones en equipos All-Defense y Novato del Año 2006. Fue incluido en la lista de los 75 mejores jugadores de la historia de la NBA y lideró la liga en asistencias y robos en múltiples temporadas. Estos reconocimientos resumen una combinación poco común de excelencia ofensiva, lectura de juego y defensa.
En lo estadístico, Chris Paul termina su carrera entre los líderes históricos en varias categorias, actualmente ocupa el segundo lugar en la clasificación all-time de asistencias y robos, marcadores que subrayan su influencia directa en el juego y la consistencia a lo largo de 21 temporadas.
Más que números, el impacto en la cancha y fuera de ella
Chris Paul redefinió el papel del base en la NBA moderna. No sólo fue el arquitecto de ataques, su capacidad para leer defensas, controlar ritmos y generar ventajas fue durante años el referente para la posición, sino que su influencia se extendió fuera de la cancha. Siempre ha estado entre las mejores noticias NBA por su liderazgo, su gestión colectiva y participación en decisiones institucionales (incluyendo, en distintos momentos, roles de voz dentro de la asociación de jugadores) lo consolidaron como figura de peso en el ecosistema del baloncesto.
Su paso por múltiples franquicias como New Orleans (Hornets), Los Angeles Clippers (la era “Lob City”), Houston, Oklahoma City, Phoenix, Golden State, San Antonio y por último el retorno a Clippers muestra, además, una carrera que combinó revivals individuales con intentos continuos de alcanzar el anillo que, paradójicamente, se le negó como pieza titular. Aun así, sus liderazgos permitieron resurgimientos colectivos en varios vestuarios.
Su legado, ¿cómo se recordará a Chris Paul?
Periodísticamente puede trazarse al menos tres líneas de legado:
1. El “arquitecto” del juego de equipo moderno: Su concepto de control del tempo y creación colectiva siempre fue paste de las noticias NBA, debido a su fuerte influencia en generaciones de bases y en la manera en que los equipos estructuran la ofensiva.
2. Durabilidad y excelencia sostenida: Mantenerse en la élite (All-NBA y defensivamente) por más de una década convierte su carrera en un referente de consistencia.
3. Figura institucional y cultural: Su participación en asuntos de liga y su visibilidad global lo elevan más allá del rendimiento, como embajador del deporte.
Último acto y preguntas abiertas
Chris Paul confirmó que afrontará la actual temporada como la última, dejando tras de sí interrogantes naturales: ¿cómo será su despedida en cada cancha que lo vio crecer? ¿Qué rol tendrá en el baloncesto al término de su carrera? ¿En un futuro no muy lejano será entrenador, ejecutivo, embajador? En estas noticias NBA, Chris Paul se mostró agradecido y consciente de que “queda mucho por delante” en este último tramo, un cierre que promete homenajes y debates sobre su lugar definitivo en la historia del juego.





















