En las noticias NBA, donde el rendimiento en cancha se entremezcla con sombras fuera de ella, un incidente en un aeropuerto texano ha encendido alarmas en Dallas. Un jugador de los Mavericks enfrenta cargos por posesión de una sustancia prohibida, un suceso que llega en medio de un inicio de temporada plagado de ausencias y derrotas. Con la franquicia luchando por encontrar su ritmo, esta situación no solo cuestiona la disciplina interna, sino que podría alterar dinámicas en un backcourt ya vulnerable.
El incidente en el aeropuerto: Detalles de un arresto inesperado
El sábado 25 de octubre, agentes de seguridad en la terminal C del Aeropuerto Internacional de Dallas-Fort Worth detectaron un contenedor negro con una sustancia verde en el equipaje de un pasajero. Se trataba de 45 gramos, aproximadamente 1,6 onzas de marihuana, cantidad que supera el umbral de posesión menor en Texas pero no alcanza para cargos graves de tráfico. El implicado era Brandon Williams, el base de 25 años de los Mavericks, quien viajaba por motivos personales tras recibir permiso del equipo para un fin de semana libre. Según el informe policial, Williams cooperó plenamente, y tras ser procesado, fue liberado bajo fianza de 500 dólares.
Williams, originario de Los Ángeles y egresado de Arizona donde promedió 12,3 puntos y 3,9 asistencias en su año senior de 2020-21, no es un novato en la liga. Llegó a Dallas en 2023 vía contrato de dos vías, destacando en la burbuja de finales de 2024-25 con 8,3 puntos y 2,4 asistencias en 18 minutos por juego, lo que le valió un acuerdo multianual garantizado en abril de 2025 por tres años y 15,2 millones. En total, acumula 76 partidos NBA, con promedios de 8,4 puntos, 2,5 asistencias y 42,3% en tiros de campo.
Esta temporada, en los dos primeros encuentros, registró tres asistencias en 19 minutos, sin anotar, pero con destellos de velocidad que lo posicionaban como respaldo clave. El contexto personal añade capas: el 30 de septiembre, Williams perdió a su amigo y excompañero en el instituto Crespi Carmelite de California, víctima de leucemia. A raíz de esto, publicó en redes un tributo emotivo, explicando su ausencia en pretemporada y los dos últimos juegos derrotas ante Clippers y Thunder como “razones personales”. Ahora, figura como dudoso para el miércoles contra Indiana, con el equipo citando nuevamente motivos no especificados.
Implicaciones para los Mavericks: Un backcourt en jaque y políticas de la liga
Dallas arrastra un 1-3 en su racha inicial en casa, con derrotas abultadas ante Spurs (125-92) y Thunder (118-105), donde la ausencia de profundidad en la posición base se notó. Kyrie Irving, el base titular, se recupera de una rotura de ligamento cruzado anterior en la rodilla izquierda sufrida el 3 de marzo de 2025 contra Sacramento; su regreso se prevé para enero de 2026, tras nueve meses de rehabilitación que avanza “por buen camino” según reportes médicos.
Dante Exum, su respaldo natural, arrastra molestias en la rodilla derecha desde pretemporada, limitándolo a no jugar en los cuatro juegos. Esta carencia forzó a D’Angelo Russell fichado en verano, a asumir más creación, pero hasta el momento el ex Lakers no ha logrado la consistencia deseada. La posesión de marihuana, aunque legal en 24 estados para uso recreativo y medicinal en la mayoría, sigue siendo delito menor clase B en Texas: multa de hasta 2.000 dólares y hasta 180 días de cárcel para cantidades bajo dos onzas. Para la NBA, el panorama es más benigno: desde el nuevo convenio colectivo de 2023, el cannabis se eliminó de la lista de sustancias prohibidas, cesando pruebas aleatorias y permitiendo inversiones en empresas cannábicas, aunque no promociones directas.
Jugadores como Kevin Durant y Blake Griffin han abogado públicamente por su uso terapéutico, y la liga prioriza ahora evaluaciones por dependencia en lugar de sanciones automáticas. En noticias NBA, estos episodios recuerdan que la vida fuera de la cancha influye tanto como los puntos anotados. Para Williams, un joven de 25 años con solo 76 juegos de experiencia, esta es una lección dura en una liga que evoluciona hacia la tolerancia, pero donde la imagen pública pesa.
Freddy Díaz, nacido en Caracas, Venezuela, es un apasionado del deporte con 5 años de experiencia en creación de contenido, redacción de noticias, editoriales y pronósticos deportivos. Especializado en baloncesto, disciplina que practica desde los 8 años, vive y siente el deporte como parte esencial de su vida. Su conocimiento práctico y analítico lo convierten en una voz autorizada, combinando experiencia en la cancha con una sólida trayectoria en el mundo del periodismo y análisis deportivo.
