Cooper Flagg vivió el pasado lunes una noche para la historia y acaparó las noticias NBA con sus 42 puntos, siete rebotes y seis asistencias en 42 minutos, pero la hoja estadística no bastó para evitar la derrota de Dallas ante Utah (140-133 en tiempo extra). Fue la mayor anotación registrada por un jugador de 18 años en la historia de la NBA, superando la marca que LeBron James había establecido en 2003. Flagg logró 13/27 en tiros de campo y un notable 15/20 en tiros libres en el juego.
La actuación, además de su valor simbólico, tiene impacto práctico, el novato llegó a su tope personal en una franquicia que le ha confiado el número 1 del draft y que lo está integrando en un rol de volumen y responsabilidad creciente. Dallas usó a la ex estrella de la Universidad Duke como eje ofensivo en tramos decisivos; el resultado final, sin embargo, mostró las limitaciones del equipo en momentos clave (defensa en el cierre, manejo del balón y profundidad), factores que amortiguaron la celebración individual.
¿Emergencia más que realidad?
En lo que va de temporada Flagg promedia alrededor de 18.4 puntos, 6.3 rebotes y 3.5 asistencias por partido, cifras que han subido en diciembre tras varias salidas de alto volumen (en el mes promedia más de 24 puntos por partido). Esos números lo mantienen como la referencia ofensiva más consistente de los Dallas Mavericks y justifican por qué aparece en las noticias NBA entre los favoritos para el premio de Novato del Año desde el inicio de curso.
Ese pico de 42 puntos no es un accidente aislado, en diciembre Cooper Flagg ha mostrado una racha de mayor eficiencia y agresividad en el aro (más minutos, mayor protagonismo y mayor cuota de tiros libres), rasgos que explican un incremento temporal en su producción. Aun así, la variabilidad propia de cualquier rookie (tanto en eficiencia como en toma de decisiones en momentos calientes) sigue siendo un factor a tener en cuenta.
Comparación con los mejores novatos recientes
Para situar la actuación del nacido en Newport en las noticias NBA conviene mirar a los ganadores del premio Novato del Año (ROY) de las últimas campañas: Victor Wembanyama, en su temporada 2023-24, terminó con promedios de aproximadamente 21.4 PPG, 10.6 RPG y 3.9 APG y fue elegido por su impacto inmediato en dos lados de la cancha; Paolo Banchero (2022-23) promedió 20/6.9/3.7; y el ganador 2024-25, Stephon Castle, tuvo otra línea (más discreta en puntos) pero impacto defensivo y continuidad. En ese contexto, Flagg reúne un cóctel de credenciales (talento ofensivo, tamaño, visión) que lo pone en el radar, si bien sus números totales todavía quedan por debajo de la temporada histórica de un Wembanyama.
Si la comparación se hace con las actuaciones individuales, partidos de 40+ de novatos, Flagg se ubica en la cúspide por edad (es el más joven en alcanzar 40 puntos), pero otros novatos que ganaron el ROY lo hicieron mediante consistencia a lo largo de la temporada y aporte en ambos extremos, no solo por un partido emblemático. En suma: una noche de 42 impresiona y marca tendencia, pero no sustituye la regularidad de 70–80 partidos con impacto sostenido que suelen valorar los votantes.
¿Le alcanza para ser Novato del Año?
Las noticias NBA y los analistas ya colocaban a Flagg como favorito al ROY desde antes de la temporada; su reciente corrida solo refuerza esa percepción. Medios especializados y columnas de probabilidades lo mantienen como líder en las apuestas. Pero la respuesta a la pregunta de si “ganará” depende de variables fuera de su control: salud (la de él y la del equipo), minutos disponibles y la segunda mitad de campaña de jugadores que también están brillando como Kon Knueppel en Charlote Hornets o el mismo VJ Edgecombe en los 76ers (si hace una segunda mitad como su arranque de campaña)
Analíticamente, sus probabilidades reales suben si mantiene eficiencia (TS% alto) y reduce las pérdidas de balón en finales; un jugador que combina números atractivos con momentos decisivos en victorias suele ganar más votos. Si el joven alero se queda en altibajos, picos espectaculares pero partidos fríos, el trofeo podría quedar en manos de alguien con menor flash pero más consistencia (cough-cough Knueppel)
La noche del pasado lunes y los 42 puntos contra Utah instala a Cooper Flagg entre las noticias NBA y da fuerza al debate grande de la temporada, no es solo una exhibición para el highlight reel, sino la confirmación de que la franquicia puede construir en torno a él. Sin embargo, para transformar actuaciones aisladas en un palmarés (Novato del Año) necesitará traducir su talento en rendimiento sostenido, mejor defensa colectiva del equipo y victorias en las que su aporte sea clave en los minutos decisivos.
Gizech Daniel Luy Nuñez, nacido en Caracas en 1989, descubrió su pasión por el deporte a los cinco años durante un clásico Caracas–Magallanes. Desde entonces, ha seguido de cerca el fútbol, béisbol, baloncesto y automovilismo, inspirándose en figuras como Jordan, Schumacher y Roberto Carlos. Periodista de profesión, hoy combina su amor por el deporte con la escritura sobre apuestas deportivas y casinos en línea.
