Dentro del buen arranque de temporada de los Lakers, han recibido una noticia que pueden frenar su rendimiento en diciembre. Austin Reaves, el jugador que ha emergido como pilar indiscutible en el esquema de Los Ángeles, se pierde al menos una semana por una distensión leve en la pantorrilla izquierda. ¿Cómo afectará esto a un equipo que depende de su explosividad para mantener el ritmo en la Conferencia Oeste? La respuesta podría redefinir su camino en lo que resta de mes.
El ascenso meteórico de Reaves y el golpe de la lesión
Austin Reaves ha sido la revelación absoluta en esta campaña 2025-26 para los Lakers. Con solo 27 años, el jugador ha elevado su juego a niveles estratosféricos, promediando 27,8 puntos por encuentro en sus 21 apariciones hasta ahora. No solo eso: sus 6,7 asistencias y 5,6 rebotes por partido lo convierten en un motor versátil que fluye con naturalidad en el ataque. Sus porcentajes de tiro son impresionantes: un 50,3% en lanzamientos de campo, 36,9% desde el perímetro y un casi perfecto 87,5% en tiros libres, rozando el exclusivo club de eficiencia 50/40/90.
Sin embargo, el destino intervino de manera cruel durante los últimos días. La distensión en la pantorrilla izquierda se manifestó de forma gradual, según reveló el entrenador JJ Redick tras una sesión de práctica. “No se puede señalar un momento exacto en el partido, pero ya se notaba tensión el día anterior, aunque hicimos trabajo ligero a propósito”, explicó Redick. Clasificada como grado uno, la lesión es leve, pero el cuerpo médico de los Lakers opta por la precaución máxima. Lesiones en la pantorrilla han sido traicioneras en la liga este año; jugadores como Damian Lillard y Tyrese Haliburton intentaron jugar con molestias similares el pasado y terminaron con rupturas de Aquiles.
Aquí, la reevaluación está programada en siete días, lo que significa que Reaves podría perderse los próximos tres compromisos fuera de casa: contra los Suns este domingo, los Jazz el jueves y los Clippers el sábado en el Intuit Dome. Este parón llega en un momento delicado. En los dos juegos previos, Reaves bajó su producción a 13 puntos por partido con un tiro del 28,1%, afectado por un calendario agotador que incluyó duelos intensos en Toronto, Boston y Filadelfia. Redick lo atribuyó al desgaste: “Nuestro equipo de rendimiento señaló que esos tres partidos seguidos fueron exigentes en intensidad y carga de trabajo” afirmó.
Desafíos defensivos: Los Lakers buscan respuestas urgentes
Más allá de la ofensiva, donde Reaves brilla, los Lakers enfrentan un talón de Aquiles evidente en defensa. El equipo ha perdido tres de sus últimos cinco encuentros, y la gota que colmó el vaso fue la derrota 132-119 ante los Spurs en los cuartos de final de la Copa de la NBA el miércoles. En ese juego, permitieron 35 puntos en transición, la cifra más alta de la temporada contra cualquier rival. Redick no endulzó la píldora tras una sesión de video el viernes: “Nadie en esa sala cree que seamos un buen equipo defensivo ahora, pero tampoco que no podamos serlo. Tenemos que mejorar”.
Con LeBron James de vuelta tras su ausencia reciente, el trío estelar genera expectación, pero la retaguardia sigue siendo vulnerable. Ocupan el puesto 22 en eficiencia defensiva, con un rating de 114,7 puntos permitidos por cada 100 posesiones. La falta de talento bidireccional en el roster, un problema heredado, se agrava sin Reaves, quien aporta 1,2 robos por juego y presión constante en el perímetro.
Redick, en su segundo año al mando, ya ajustó alineaciones la temporada pasada para alcanzar el primer lugar en defensa tras el intercambio de Doncic. Ahora, con Marcus Smart recuperado y Gabe Vincent disponible, el plan pasa por redistribuir minutos. El banco, último en anotación con solo 24,5 puntos por partido, obligará a los titulares a cargar más peso. Doncic, con su visión élite, heredará más responsabilidades en la creación, pero la urgencia es palpable: sin ajustes, el viaje por el Oeste podría complicarse.
Freddy Díaz, nacido en Caracas, Venezuela, es un apasionado del deporte con 5 años de experiencia en creación de contenido, redacción de noticias, editoriales y pronósticos deportivos. Especializado en baloncesto, disciplina que practica desde los 8 años, vive y siente el deporte como parte esencial de su vida. Su conocimiento práctico y analítico lo convierten en una voz autorizada, combinando experiencia en la cancha con una sólida trayectoria en el mundo del periodismo y análisis deportivo.
