New York Knicks concluyeron el miércoles una búsqueda de varias semanas para su próximo entrenador jefe, ofreciendo oficialmente el puesto a Mike Brown, dos veces Entrenador del Año de la NBA. Con cuatro anillos como asistente en Spurs y Warriors, Brown aporta una experiencia invaluable a la organización de los Knicks. Lleva semanas siendo el claro favorito.
Brown entrenó recientemente a Sacramento Kings durante dos temporadas y media, comenzando en 2022. Fue despedido a mediados de la temporada pasada después de que la defensa de Sacramento se desmoronara y perdiera su puesto en el vestuario. Poco después, De'Aaron Fox fue traspasado por Zach LaVine y comenzó la debacle de Sacramento.
Es difícil culpar a Brown por cómo se desarrollaron las cosas en Sactown. Es una de las franquicias de la NBA notoriamente complicada con una gestión pésima. A Brown le gusta desafiar a sus jugadores; opera con un entusiasmo tradicional y un espíritu competitivo, lo que debería ayudar a la afición a calentarse rápidamente. Hay mucha energía de Thibs en la forma en que Mike Brown hace las cosas.
Dicho esto, a pesar de su amplia experiencia y éxito a lo largo de sus años como estratega en la NBA, no todos los aficionados de los Knicks están convencidos con la nueva contratación. Después de todo, Thibs llevó a Nueva York a la final de conferencia por primera vez en 25 años.
Estilos que se complementan
Thibs se hizo famoso por abandonar el pick-and-roll de Jalen Brunson y Karl-Anthony Towns a mitad de temporada sin motivo aparente. Nunca aprovechó al máximo una plantilla ofensiva muy talentosa.
Mike Brown llevó a los Kings al primer puesto en ataque de la NBA hace un par de años con De'Aaron Fox y Domantas Sabonis. Los aficionados ya pueden imaginar lo que puede hacer con una plantilla mejorada en Nueva York. Los Knicks están a punto de acelerar el ritmo y apoyarse mucho más en la singular combinación de Brunson y KAT. Tampoco se debería ver un declive defensivo, si es que hay alguno. Brown maneja con precisión ambos extremos, mientras que la ejecución defensiva de los Knicks con Thibs no fue tan impecable como cabría esperar dada su reputación.
Un historial complicado
Brown ganó muchos partidos con Cleveland en la década del 2000, pero fue despedido en un vano intento por apaciguar a LeBron James, quien se marchó a Miami poco después. Eso lo llevó a los Lakers, donde tuvo una mala racha con estrellas de la NBA como Dwight Howard, Steve Nash y Kobe Bryant, y como resultado, dirigió cinco partidos en su segunda temporada con la organización.
Regresó a Cavs, pero fue despedido de nuevo tras una sola temporada perdedora. Eso lo llevó a una larga y fructífera etapa como asistente principal de Steve Kerr antes de aterrizar en Sacramento.
En general, los “fracasos” de Brown se pueden achacar más a la propiedad y a la construcción de la plantilla que a sus propias deficiencias. No es un entrenador perfecto, y es evidente que su actitud sensata fue una fuente de tensión en el vestuario de los Kings (y en el de Cleveland hace años). Pero los Knicks están acostumbrados a Thibs, quien tiene un estilo de entrenamiento igualmente directo. Así que debería funcionar.
Gizech Daniel Luy Nuñez nació en Caracas en 1989 y a los 5 años presenció su primera final deportiva, un clásico de béisbol entre Caracas y Magallanes. Desde ese momento, su pasión por el deporte creció, abarcando disciplinas como el fútbol, béisbol, baloncesto y automovilismo, así como admiración por figuras como Michael Jordan, Pete Sampras, Michael Schumacher, Ken Griffey Jr. y Roberto Carlos.
Esta pasión lo ha acompañado a lo largo de su vida, y hoy, 3 décadas después de aquel primer evento, se dedicó a escribir sobre deportes, apuestas deportivas y casinos en línea. Gizech, además, es periodista de profesión, por lo que compagina su pasión por el deporte con su habilidad para la escritura.
