
En el mundo de la NBA, donde cada regreso puede alterar el equilibrio de un equipo, los San Antonio Spurs acogen una noticia que acelera el pulso de sus aficionados. De’Aaron Fox, la estrella que ha esperado pacientemente en las sombras, está listo para saltar a la cancha. Su ausencia al inicio de la temporada ha sido un desafío, pero ahora, con el equipo en racha, su incorporación promete transformar la dinámica. ¿Cómo impactará este base veloz en un conjunto que ya se encuentra destacando? La respuesta podría redefinir el rumbo de los San Antonio Spurs en esta campaña.
El camino de recuperación de Fox y su llegada estratégica
De’Aaron Fox ha pasado las últimas semanas en un proceso meticuloso de rehabilitación, superando una lesión en el tendón de la corva que lo apartó desde la pretemporada. A sus 27 años, este jugador, conocido por su explosividad, ha intensificado los entrenamientos en los días previos, asegurando que su cuerpo responda al ritmo frenético de la liga. El anuncio oficial llegó el viernes, justo antes del duelo de la Copa de la NBA contra Houston, que los Spurs ganaron con autoridad.
Ahora, este sábado por la noche, Fox debutará en la temporada en el Frost Bank Center ante los New Orleans Pelicans, un escenario perfecto para su reaparición. Su traspaso a los San Antonio Spurs, fue un movimiento audaz que involucró a tres equipos y marcó el fin de su era en Sacramento. Desde entonces, ha firmado una extensión máxima de cuatro años por 229 millones de dólares, un compromiso que refleja la confianza en su rol como motor ofensivo. En los 17 encuentros que disputó con el equipo la temporada pasada, Fox registró promedios de 19,7 puntos, 4,3 rebotes y 6,8 asistencias por partido. Esos números, aunque limitados por el tiempo en cancha, ya insinuaban el potencial de su asociación con Victor Wembanyama.
Juntos solo compartieron 120 minutos en cinco juegos, pero el impacto fue inmediato: una química que elevó el juego colectivo. Lo que hace único a Fox es su consistencia en momentos clave. En las últimas seis temporadas, solo dos jugadores han mantenido promedios de al menos 20 puntos, 5 asistencias y un robo por encuentro: él y Luka Doncic de los Lakers. Esta versatilidad no solo aporta anotación, sino manejo de balón. Con Fox de vuelta, el equipo gana profundidad en la dirección, permitiendo rotaciones más fluidas y reduciendo la carga sobre los novatos.
El dúo dinámico: Fox y Wembanyama, el corazón renovado de los Spurs
La verdadera magia surge al imaginar a Fox y Wembanyama en sintonía plena. La temporada pasada, las lesiones limitaron su convivencia, pero ahora, con ambos disponibles, los San Antonio Spurs podrían desatar una ofensiva impredecible. Wembanyama, el fenómeno francés, ha mostrado destellos de grandeza en los primeros juegos: en la reciente victoria 121-110 sobre Houston, sumó 22 puntos, destacando en la pintura con determinación renovada tras dos salidas discretas como visitantes. Fox, con su velocidad y visión, complementa esto al instante: penetraciones rápidas que abren espacios para los tiros de media distancia del joven pívot, o pases precisos que explotan mismatches.
Los Spurs llegan a este encuentro con un récord de 6-2, terceros en la Conferencia Oeste. Tras un inicio arrollador de cinco triunfos seguidos, absorbieron dos derrotas ante Phoenix y los Lakers, pero respondieron con garra en la Copa de la NBA. En ese último partido, Harrison Barnes lideró con 24 puntos, Julian Champagnie y Wembanyama aportaron 22 cada uno, mientras Devin Vassell sumó 15 y Stephon Castle brilló con 14 puntos y 13 asistencias. Champagnie, con sus triples clave en el cierre, y Castle, con su rebote ofensivo decisivo, encarnaron la resiliencia del grupo.
Esta victoria no solo cortó la racha de cinco juegos de Houston, sino que reforzó la confianza en un núcleo joven que ya genera victorias contra rivales de récord positivo. El regreso de Fox no es aislado; marca el inicio de una ola de refuerzos. Jugadores como Jeremy Sochan, Kelly Olynyk y Lindy Waters III ya han vuelto de sus respectivas dolencias, fortaleciendo la rotación. Dylan Harper, el base novato, estará fuera varias semanas por una distensión en la pantorrilla, y Luke Kornet se recupera de un esguince de tobillo, pero la llegada de Fox mitiga esas ausencias.





















