¡Nueva York, de pie! El grito resonó en Las Vegas y retumbó hasta Manhattan. Por primera vez desde 1973, los New York Knicks han levantado un trofeo oficial de la liga y esta vez con la NBA Cup.
En una noche que quedará grabada en la memoria de sus aficionados, los Knicks se consagraron campeones de la NBA Cup 2025 tras vencer a los San Antonio Spurs por 124-113 en una final épica que tuvo de todo: remontadas, héroes inesperados y la consagración de una nueva era.
La victoria no solo significa un título más para las vitrinas; sino el impulso para un proyecto que quiere más. Con este triunfo en la NBA Cup, los Knicks cuelgan una nueva pancarta junto a la del campeonato de 1973.
Brunson, el MVP que guía el camino
El corazón de este equipo tiene nombre y apellido: Jalen Brunson. El base fue nombrado MVP de la NBA Cup tras anotar 25 puntos y liderar a su equipo en los momentos más calientes del partido.
Brunson, junto a sus compañeros de Villanova Josh Hart y Mikal Bridges, ya saben lo que es ganar títulos universitarios, y ahora ha trasladado esa mentalidad ganadora al escenario profesional más exigente.
“Encontraremos la manera. Ese será nuestro lema de ahora en adelante”, declaró un emocionado Brunson tras recibir el trofeo. Su liderazgo fue fundamental para mantener al equipo enfocado cuando las cosas se pusieron difíciles.
La remontada y los héroes de la noche
El partido no fue sencillo. Los San Antonio Spurs, liderados por el novato Dylan Harper (21 puntos) y el fenómeno Victor Wembanyama (18 puntos), dominaron gran parte del encuentro. Sin embargo, la resistencia de los Knicks apareció cuando más importaba. Una racha de 13-1 al final del tercer cuarto cambió el destino de la final, poniendo a Nueva York arriba 100-95, una ventaja que no soltaron.
OG Anunoby fue el máximo anotador con 28 puntos, siendo un titán en ambos costados de la cancha. Pero la victoria en esta NBA Cup también se construyó en la pintura, donde los Knicks dominaron el rebote 59-42. Mitchell Robinson fue una bestia bajo los tableros con 15 rebotes (10 ofensivos), mientras que Karl-Anthony Towns, jugando lesionado, aportó 16 puntos y 11 rebotes en una muestra de coraje.
Mención especial merece Tyler Kolek, quien desde el banquillo aportó 14 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias, siendo clave en el impulso final. “Las cosas no siempre salen como las planeaste. Fue un partido feo, pero mantenerse conectado es importante”, reflexionó Josh Hart tras el encuentro.
Más que un trofeo: El impulso para el futuro
Ganar la NBA Cup trae consigo beneficios tangibles: cada jugador se llevó un bono de más de medio millón de dólares. Pero el valor real de este título es el impulso anímico. La historia reciente de la NBA Cup sugiere que llegar a la final es un buen augurio: los cuatro finalistas anteriores alcanzaron los playoffs, el Thunder ganó el anillo la temporada pasada y los Pacers alcanzaron las Finales de la liga.
Con un récord de 18-7, los Knicks lideran su división y miran al futuro con confianza. “Superar esa adversidad al principio de la temporada nos da confianza”, sentenció Hart. La NBA Cup ya tiene dueño, y los Knicks están listos para buscar el premio mayor en junio.
Gizech Daniel Luy Nuñez, nacido en Caracas en 1989, descubrió su pasión por el deporte a los cinco años durante un clásico Caracas–Magallanes. Desde entonces, ha seguido de cerca el fútbol, béisbol, baloncesto y automovilismo, inspirándose en figuras como Jordan, Schumacher y Roberto Carlos. Periodista de profesión, hoy combina su amor por el deporte con la escritura sobre apuestas deportivas y casinos en línea.
