La cima de la NBA: Una temporada individual que rompió todos los récords
La cima de la NBA: Una temporada individual que rompió todos los récords 2

Cuando se habla siempre de la NBA, se inicia un debate de ¿Quién es el mejor jugador de la historia?, muchos nombres saltan y entre los argumentos se hablan de logros y récords inéditos, algo que sin duda caracterizó la carrera de Michael Jordan.

El legado de Jordan en la liga se define por sus campeonatos, sus jugadas icónicas y una mentalidad competitiva que cambió el deporte.

Sin embargo, para entender la magnitud de su dominio, es necesario viajar a la temporada 1987-88, una campaña que estadísticamente se considera una de las mejores actuaciones individuales de todos los tiempos y que estableció un récord que permanece intacto.

La temporada perfecta: MVP y DPOY

Antes de que los Chicago Bulls se convirtieran en una dinastía, un joven Michael Jordan demostró que podía dominar la liga en ambos costados de la cancha de una manera nunca antes vista.

Durante la temporada del 87-88, Jordan no solo fue el máximo anotador de la competición, sino que también fue reconocido como el mejor jugador defensivo.

Sus números a lo largo de 82 partidos jugados son un testimonio de su impacto total:

  • 35.0 puntos por partido.
  • 5.9 asistencias por partido.
  • 5.5 rebotes por partido.
  • 3.2 robos por partido (Líder de la NBA).
  • 1.6 tapones por partido.
  • 53.5% de acierto en tiros de campo.

Esta combinación de excelencia ofensiva y defensiva le valió ser nombrado MVP de la temporada y Mejor Jugador Defensivo (DPOY) en el mismo año. Lograr ambos galardones simultáneamente es una hazaña que solo han conseguido Hakeem Olajuwon y Giannis Antetokounmpo desde entonces, pero Jordan fue el primer jugador de perímetro en hacerlo, estableciendo un precedente único en la historia de la NBA.

La importancia de esta temporada radica en que solidificó a Jordan no solo como un anotador imparable, sino como el jugador más completo y determinante de su era, mucho antes de ganar su primer anillo.

El Legado de Michael Jordan en la NBA en récords y logros

Más allá de esa campaña histórica, la carrera de Michael Jordan está repleta de reconocimientos que lo sitúan en el olimpo del baloncesto. Muchos especialistas del baloncesto en todo el mundo lo denominan como el “GOAT”, incluso jugadores de la nueva escuela lo consideran así y lo mantienen como una referencia dentro de sus carreras.

Durante quince temporadas en la NBA dejó amplios argumentos para estar en el olimpo del baloncesto.

  • 6 veces campeón de la NBA (1991, 1992, 1993, 1996, 1997, 1998)
  • 6 veces MVP de las Finales de la NBA
  • 5 veces MVP de la temporada regular
  • 10 veces máximo anotador de la NBA
  • 14 veces All-Star de la NBA
  • 3 veces MVP del All-Star Game
  • 11 veces en el Mejor Quinteto de la NBA (10 en el primero)
  • 9 veces en el Mejor Quinteto Defensivo de la NBA
  • Mejor Jugador Defensivo del Año (1988)
  • Rookie del Año (1985)
  • Miembro del Salón de la Fama del Baloncesto

Su impacto y sus récords siguen siendo una referencia para medir la grandeza en la NBA moderna.

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