LeBron James rindió al máximo, pero su equipo perdió en el United Center de Chicago ante unos Bulls muy concentrados liderados por los bases Derrick Rose y Kirk Hinrich. Los visitantes tuvieron el tiro final para ganar, pero fue un triple sobre la bocina y desde mitad del campo.
Chicago demostró la vulnerabilidad del mejor equipo de la fase regular y de paso se acercó en el marcador de la serie, que se coloca 2-1.
Chicago 108 Cleveland 106 (1-2)
Llegaba al United Center LeBron James asegurando que amaba Chicago, pero en la pista este grandísimo jugador nada sabe de amores ni cariños, como demuestra el hecho de que endosara a su rival 39 puntos, 10 rebotes, 8 asistencias y 3 tapones. El gran LeBron, sin embargo, no fue suficiente. Ni siquiera con el apoyo de dos escuderos de lujo como son Mo Williams (21 puntos con 5 triples) y Antawn Jamison (19 tantos y 11 rebotes).
Este tercer partido fue para los Toros de Chicago, el equipo de los seis anillos de Michael Jordan, el equipo, anoche, de Derrick Rose y Kirk Hinrich, bases que juegan juntos y que martillearon esta vez a la defensa de los Cavs, más endeble que nunca.
Rose hizo 31 puntos y 7 asistencias y su protagonismo queda patente en los 26 tiros que intentó. Hinrich se fue a los 27 tantos con 5 rebotes y 5 asistencias, mostrándose infalible desde el triple (4 de 4).
A esta pareja letal, se sumaron Luol Deng (20 tantos) y un gran Joakim Noah (10 puntos, 15 rebotes y 5 asistencias). Es decir, los hombres más importantes de Del Negro funcionaron a la perfección. Y aún así pudieron perder de forma increíble, porque ganaban 104-96 a 38 segundos del final y permitieron que los Cavaliers tuvieran el tiro final para ganar.
Un triple de James y 2 de Williams, más el desacierto local, hicieron que Parker capturara el rebote de un tiro libre capital fallado por Deng y a la carrera intentara un imposible, que cobró forma en intento triple desde el medio del campo y sobre la bocina. No tuvo éxito y Cleveland perdió.
Perdió a pesar de anotar 14 triples y de tener al citado trío James-Williams-Jamison a gran nivel. El problema estuvo en que Shaquille O’Neal apenas aportó y que la segunda unidad fue un total fiasco, con Varejao haciendo 6 faltas en 20 minutos, Ilgauskas jugando 5 minutos y Hickson trasnformado de jugador titular a jugador totalmente residual (jugó 46 segundos) por la incorporación de O’Neal e Ilgauskas.
Chicago sabe que la eliminatoria es un imposible, pero por de pronto ya ha ganado un partido a Cleveland. Que les quiten lo bailao.
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