Tras 48 horas deshojando la margarita, Troy Murphy ha decidido que su futuro estará teñido del color verde de los Celtics de Boston y no del rojo de los Miami Heat. Los Celtics ganan así por la mano a sus rivales en este primer asalto.
No será el único, ya que los despachos de las principales franquicias que aspiran al título bullen de actividad en estos momentos a la búsqueda de pescar refuerzos entre los jugadores que en las últimas horas han quedado libres.
Con la decisión de Murphy, anunciada a ESPN por correo electrónico, y la de Jared Jeffries, que se unirá a los Knicks, Mike Bibby aparece ahora como el más deseado de entre los que todavía no han decidido su futuro, aunque todo indica que aquí sí podrían ser los Heat quienes se llevasen el gato al agua.
La decisión de Murphy de unirse a los Celtics, parece cerrar el paso a Leon Powe, con cuya incorporación a Boston también se había especulado, y deja campo libre a los Grizzlies que también pujan por el jugador.
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