En el vertiginoso mercado Euroliga, donde cada movimiento puede inclinar la balanza de una temporada agotadora, el Olympiacos ha dado un golpe de efecto al anunciar la llegada de un base con experiencia de la mejor liga del mundo. Nadie lo veía venir en el Pireo, pero este refuerzo inesperado llega en el momento justo para un equipo que alterna brillos y sombras. ¿Será el catalizador que impulse a los griegos hacia lo más alto? La incógnita mantiene en vilo a la competición.
El anuncio que rompe la dinámica irregular del Olympiacos
El Olympiacos, séptimo en la tabla con un balance de ocho victorias y cinco derrotas, ha padecido una montaña rusa de resultados que ha puesto en jaque su ambición continental. Con la Euroliga devorando jornadas a un ritmo frenético, el equipo de Georgios Bartzokas ha encadenado altibajos: seis triunfos en los últimos diez choques, pero con una alternancia de victorias y caídas en las cuatro más recientes que genera dudas sobre su consistencia. La lesión de Keenan Evans, roto el tendón de Aquiles en su reaparición tras 533 días inactivo, dejó un vacío en el perímetro que urgía cubrir.
Ahí entra Monte Morris, el base estadounidense de treinta años y 1,88 metros, cuya incorporación oficial se confirmó el 10 de diciembre. Libre tras su corta estancia en los Indiana Pacers donde jugó seis partidos entre el 9 y el 17 de noviembre, promediando tres puntos, 1,2 rebotes y 1,5 asistencias en 10,8 minutos, Morris firma hasta junio de 2026 por unos 900.000 dólares. El club griego ya lo sondeó en septiembre, pero el jugador optó por perseguir un rol en la NBA; ahora, con las puertas cerradas en Estados Unidos, aterriza en El Pireo como un revulsivo inmediato.
Esta movida no es improvisada. Bartzokas, que sueña con romper trece años de sequía en la Euroliga, el último título fue en 2012, necesitaba profundidad en la creación de juego. Morris, con su visión periférica y tiro exterior fiable, 38,8 por ciento en triples a lo largo de su carrera, encaja en un backcourt que ya cuenta con talentos como Saben Lee y Thomas Walkup. Su llegada mitiga la presión sobre Evan Fournier y Sasha Vezenkov, los referentes ofensivos, y añade experiencia en rotaciones para partidos de alta intensidad.
La trayectoria NBA de Morris: De promesa tardía a activo versátil
Monte Morris no es un novato en escenarios de élite; su currículo en la NBA, forjado en nueve temporadas, lo avala como un profesional curtido que sabe adaptarse. Elegido en la segunda ronda del draft de 2017 por los Denver Nuggets con el pick 51, pasó cinco años en Colorado, donde coincidió con Juancho Hernangómez y se consolidó como suplente fiable: 75 partidos en 2021-22, con promedios de 10,2 puntos y 3,8 asistencias. Su paso por Washington (2022-23), Detroit (2023-24 parcial), Minnesota (2024 parcial), Phoenix (2024-25) e Indiana (2025) suma 420 encuentros regulares, con medias de 9,5 tantos, 2,4 rebotes y 3,6 pases en 23,4 minutos.
En playoffs, sus 57 apariciones, sobre todo con Nuggets, registran 8,3 puntos, 1,6 rebotes y 3,1 asistencias, con un 44 por ciento en campo que destaca en momentos calientes. No es un anotador explosivo, pero su eficiencia (47,4 por ciento en tiros) y bajo índice de pérdidas (1,2 por partido) lo convierten en un gestor ideal para sistemas como el de Bartzokas, que prioriza el control del tempo. En noviembre, mientras Olympiacos luchaba por mantener el ritmo en una Euroliga que ha despedido a cinco entrenadores en dos meses, Morris optó por Europa tras ser cortado por los Pacers para dar espacio salarial.
Este salto al Viejo Continente no es inédito para veteranos NBA; recuerda a casos como el de Tyler Dorsey, ya en el roster griego, que aporta 12,1 puntos esta temporada. Morris, con su 38,8 por ciento en triples en cuatro campañas por encima de los diez puntos, podría desatascar el ataque exterior de Olympiacos, que anota solo el 35 por ciento desde el arco en clutch. Después de confirmarse este movimiento en el mercado Euroliga, las expectativas crecen, ¿Podrá ser el revulsivo que necesitaba el equipo griego para impulsarlo?
Freddy Díaz, nacido en Caracas, Venezuela, es un apasionado del deporte con 5 años de experiencia en creación de contenido, redacción de noticias, editoriales y pronósticos deportivos. Especializado en baloncesto, disciplina que practica desde los 8 años, vive y siente el deporte como parte esencial de su vida. Su conocimiento práctico y analítico lo convierten en una voz autorizada, combinando experiencia en la cancha con una sólida trayectoria en el mundo del periodismo y análisis deportivo.
