
La WNBA vive un momento de incertidumbre tras la lesión de Napheesa Collier, estrella de las Minnesota Lynx y favorita al MVP 2025. Durante una victoria aplastante por 111-58 sobre Las Vegas Aces el 2 de agosto, Collier sufrió un esguince de tobillo derecho que la mantendrá fuera al menos dos semanas. Este revés pone en jaque su candidatura al MVP y el liderato de las Lynx en la liga.
Un tropiezo en el peor momento
El sábado pasado, en el Michelob ULTRA Arena, las Minnesota Lynx lograron la mayor victoria de visitante en la historia de la WNBA, un 111-58 contra las Aces. Sin embargo, la celebración se vio empañada por la lesión de Napheesa Collier. Con menos de un minuto por jugar en el tercer cuarto y una ventaja de 43 puntos, Collier colisionó con su compañera Alanna Smith mientras buscaba un rebote ofensivo, cayendo al suelo tras torcerse el tobillo derecho. La cinco veces All-Star permaneció varios minutos en el parqué, visiblemente dolorida, antes de salir asistida por el cuerpo médico y jugadoras de ambos equipos.
Las pruebas de imagen realizadas el domingo y lunes confirmaron un esguince de tobillo derecho, pero descartaron una lesión grave, según ESPN. Las Lynx anunciaron que Collier será reevaluada en dos semanas, con un regreso proyectado para mediados de agosto. Hasta entonces, la jugadora de 28 años estará ausente en al menos cuatro partidos cruciales, incluyendo un enfrentamiento contra las Seattle Storm y dos de los tres duelos contra las New York Liberty, campeonas de 2024.
Estos juegos son clave para que las Lynx mantengan su ventaja de 5.5 partidos sobre las Liberty en la carrera por el primer puesto de la WNBA. Collier, quien promedia 23.5 puntos, 7.5 rebotes, 3.5 asistencias, 1.8 robos y 1.6 tapones por partido, con un 53.7% en tiros de campo, es el corazón de las Lynx. Su ausencia plantea un desafío para el equipo, aunque la profundidad de la plantilla, reforzada por la reciente incorporación de DiJonai Carrington, podría mitigar el impacto.
¿Peligra el MVP y el sueño del campeonato?
La lesión de Collier llega en un momento crítico para su campaña al MVP de la WNBA. Como líder en anotación y candidata principal al premio, su ausencia en hasta siete partidos podría abrir la puerta a competidoras como Sabrina Ionescu o A’ja Wilson. Collier, quien ya ha perdido tres juegos esta temporada, enfrenta un límite histórico: ningún MVP ha superado el 15.7% de juegos ausentes en una temporada, y siete partidos representarían el 15.9%, según CBS Sports. Si su recuperación se extiende más allá de las dos semanas iniciales, su liderato en la carrera por el MVP podría tambalearse.
Además, Collier es una contendiente fuerte para revalidar su título de Jugadora Defensiva del Año 2024, pero su ausencia podría beneficiar a otras candidatas. La entrenadora Cheryl Reeve, cuestionada por mantener a Collier en cancha durante un partido ya decidido, defendió su decisión: “No pienso que un juego está definido en el tercer cuarto. Estas cosas pasan, es desafortunado”. La prioridad ahora es garantizar que Collier regrese al 100% para los playoffs, que comienzan el 14 de septiembre. Con una ventaja sólida en la tabla, las Lynx pueden permitirse ser cautelosas, pero la presión por el primer puesto y el título, tras caer en las Finales de 2024, sigue siendo alta.
El impacto de Collier trasciende las estadísticas. Su liderazgo, demostrado al ser capitana y MVP del Juego de Estrellas 2025 con 36 puntos, es vital para las aspiraciones de las Lynx. Mientras Minnesota se prepara para lo que viene sin su estrella, la WNBA espera el regreso de una jugadora que ha redefinido la excelencia esta temporada. ¿Podrá Collier volver a tiempo para consolidar su legado y llevar a las Lynx al título?