El base de Minnesota Timberwolves Ricky Rubio cambió este verano sus rutinas de entrenamiento dando cabida en su preparación diaria a prácticas deportivas que no había utilizado de forma continuada otros veranos.
“Ricky ha estado entrenando duro”. Las palabras son de Flip Saunders, general manager de los Timberwolves, y las recoge el diario Star Tribune, con sede en Mineápolis.
Es el propio Saunders el que explica que Rubio ha hecho carrera de campo a través, ha trabajado asiduamente con la bicicleta de montaña por relieves complicados y ha practicado kayak en el mar. Todo ello antes de incorporarse a la concentración de la selección española, con la que sigue una preparación más tradicional de cara a disputar el próximo Eurobasket de Eslovenia.
Sabido es que Ricky ya ha manifestado su interés por mejorar su físico de cara a la próxima campaña de la NBA, ya que quiere alzar su nivel de juego y desea poder completar por fin una temporada regular, algo que le ha sido imposible en sus 2 primeros años en Estados Unidos.
Ricky Rubio sólo ha podido disputar 98 de los 164 encuentros de fase regular que podría haber disputado. Y es que se perdió 66 debido a la lesión que sufrió en la rodilla, que le dejó fuera en la segunda parte de su primera campaña NBA y en el inicio de su segundo curso. El español sólo pudo jugar 41 encuentros como novato y 57 como jugador de segundo año, una situación a la que espera poner fin en la temporada 2013-2014.
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