
El Eurobasket 2025 dejó un sabor amargo para España, una selección acostumbrada a brillar en Europa, pero que esta vez se despidió antes de lo esperado. ¿Qué falló para que La Roja no repitiera sus hazañas pasadas? Desde errores tácticos hasta actuaciones decepcionantes, las causas del tropiezo español son tan sorprendentes como reveladoras. Descubre las claves que marcaron el inesperado adiós de España en Limassol.
Un roster mermado y la ausencia de un líder en el Eurobasket 2025
El Eurobasket 2025 puso a prueba a una España debilitada por ausencias clave. Jugadores como Lorenzo Brown, Alberto Díaz, Juan Núñez, Alberto Abalde y Hugo González no estuvieron disponibles debido a lesiones, decisiones personales o compromisos en la NBA. Esto dejó a España con una plantilla carente de la profundidad y experiencia que caracterizó su título en 2022. La falta de estos talentos obligó a Sergio Scariolo a depender de jóvenes como Sergio de Larrea y Mario Saint-Supéry, ambos de 19 años, quienes, pese a su potencial, no tenían la experiencia necesaria para enfrentar a potencias como Italia y Grecia.
El impacto de estas ausencias fue evidente desde el debut contra Georgia, donde el equipo mostró falta de cohesión. La ausencia de un base veterano para dirigir el ataque fue notable, con De Larrea y Saint-Supéry mostrando destellos, pero cediendo ante la presión. La inexperiencia de España fue especialmente clara contra rivales de primer nivel, donde la disciplina táctica y el rendimiento en momentos clave eran imprescindibles. Sin Brown, figura clave en 2022, España careció de un director de juego confiable, forzando una dependencia excesiva en un núcleo joven y poco probado.
La caída de España en el Eurobasket 2025 se selló por una serie de errores costosos, siendo el más grave su pésimo porcentaje en tiros libres. Según estadísticas de FIBA, España promedió un decepcionante 60% desde la línea, con un mínimo de 46,3% contra Georgia y 56,8% frente a Grecia. En el minuto final contra Grecia, España falló seis tiros libres, incluyendo tres consecutivos de Juancho Hernangómez. Estos errores convirtieron partidos ganables en derrotas dolorosas, con el encuentro ante Grecia terminando 86-90 tras un colapso tardío.
Fallos en momentos clave y el bajo rendimiento de los veteranos
El bajo rendimiento de los veteranos agravó la situación. Los hermanos Hernangómez, Willy y Juancho, héroes del Eurobasket 2022, no cumplieron las expectativas. Willy promedió solo 10 puntos por partido, mientras que Juancho se quedó en 7, cifras muy por debajo de su rol de líderes. Frente a Italia, Juancho no anotó, fallando sus cuatro intentos de triple, y Willy sumó solo un punto. Santi Aldama, único NBA del equipo, lideró con 14 puntos por partido, incluyendo un destacado doble-doble de 19 puntos y 10 rebotes contra Italia.
Sin embargo, Aldama no asumió el liderazgo en los momentos decisivos, un rol que aún no domina debido a su función más especializada en los Memphis Grizzlies. Los errores tácticos también lastraron a España. La mala selección de tiros, ataques precipitados y fallos defensivos, como faltas innecesarias y descoordinación en los cambios de marca, permitieron canastas fáciles a los rivales. De hecho, el equipo tuvo una tendencia a forzar triples cuando debía penetrar y viceversa, mostrando una falta de compostura que resultó fatal en partidos ajustados. Contra Georgia, la fragilidad en el rebote y un 32,1% en triples, evidenciaron la incapacidad de España para controlar el ritmo del juego.
A pesar del panorama sombrío, jóvenes como De Larrea y Saint-Supéry dieron esperanza. El partido de De Larrea con 15 puntos y 4 de 6 en triples contra Italia, mostró su potencial, mientras que el triple clutch de Saint-Supéry contra Grecia, casi logra una remontada milagrosa. El Eurobasket 2025 marcó un mínimo histórico para España, con su eliminación más temprana. La combinación de un roster mermado, fallos en tiros libres, bajo rendimiento de veteranos y errores tácticos creó una tormenta perfecta. Con el adiós de Scariolo, España enfrenta un camino desafiante, pero las bases para la renovación están puestas. ¿Volverá La Roja a brillar?