
Álex Mumbrú, el entrenador español de 46 años, ha logrado un hito inolvidable al guiar a Alemania al oro en el Eurobasket 2025, convirtiéndose en el primer técnico nacional en coronarse campeón continental. Pero esta gesta llega marcada por una batalla personal: una pancreatitis aguda que lo hospitalizó antes del torneo, costándole ocho kilos y forzándolo a dirigir desde la distancia. ¿Cómo superó el catalán estos obstáculos para escribir su nombre en la historia del baloncesto europeo? Esta historia de resiliencia y triunfo cautiva y obliga a explorar el camino de un líder que priorizó la pasión por encima de todo.
El complicado camino de Álex Mumbrú hacia el éxito en el Eurobasket
Álex Mumbrú asumió el banquillo de Alemania en agosto de 2024, heredando a la vigente campeona mundial de 2023 bajo Gordon Herbert. Su primer gran desafío llegó de forma inesperada: el 25 de agosto de 2025, un día antes del debut en Tampere (Finlandia), fue ingresado por pancreatitis aguda, una inflamación del páncreas que causa dolores intensos y requiere reposo absoluto. Según la Federación Alemana de Baloncesto (DBB), Mumbrú sintió un fuerte malestar abdominal tras llegar al grupo B, perdiendo ocho kilos en días y ausentándose de la primera fase.
Dirigió remotamente vía teléfono a su asistente Alan Ibrahimagić, mientras Alberto Miranda apoyaba desde el banquillo. Alemania avanzó invicta en fase de grupos, promediando cerca de 100 puntos por encuentro y siendo uno de los mejores equipos defensivos. Mumbrú reapareció en octavos ante Portugal (95-84), pero limitó su presencia física en cuartos (vs Eslovenia 99-91) y semis (vs Finlandia 98-86), reconociendo: “No estoy físicamente preparado”.
A pesar de bajas como Nick Weiler-Babb y Moritz Wagner, el equipo mostró resiliencia, con Dennis Schröder y Franz Wagner como pilares. Esta adversidad no detuvo a Mumbrú, quien mantuvo el contacto constante, inspirando a un grupo que culminó con el oro 88-83 ante Turquía en la final de Riga. Su liderazgo remoto forjó un carácter colectivo, clave en remontadas como la del último cuarto final (de 72-66 a 88-83)
El legado de Álex Mumbrú: De jugador a pionero entrenador
La carrera de Álex Mumbrú es un testimonio de dedicación. Nacido en Barcelona el 12 de junio de 1979, debutó en ACB con Joventut en 1997, ganando la Eurocup 2006 y Copa ULEB 2007 con Real Madrid. Como internacional español, disputó 113 partidos (4.8 puntos promedio), conquistando oro mundial 2006, plata olímpica 2008 y oro Eurobasket 2009. Retirado en 2018 con Bilbao Basket, promedió 11.0 puntos, 3.7 rebotes y 1.7 asistencias en. Como entrenador, debutó en Bilbao (2018-2022), logrando ascenso a ACB en 2019 y playoffs en 2022.
En Valencia Basket (2022-2024), sumó 63 victorias en 133 partidos, pero fue despedido en abril 2024 tras una racha negativa. Su nombramiento en Alemania fue un salto: DBB lo eligió por su juventud y éxitos como jugador, alineado con un equipo con figuras NBA como Schröder y los hermanos Wagner. El Eurobasket 2025, su debut mayor, fue épico pese a la pancreatitis. Hospitalizado en Tampere, perdió peso drásticamente, pero guió a Alemania a 9 victorias, oro continental (segundo tras 1993) y doblete con Mundial 2023. Mumbrú se une a Feliksas Kriaučiūnas (Lituania) y Panagiotis Giannakis (Grecia) como únicos en ganar como jugador y técnico. “Fue un privilegio liderar a estos jugadores”, dijo post-final.
Su historia humaniza el deporte: pese al dolor, priorizó el equipo, delegando en Ibrahimagić y Miranda. Algunos lo califican como “resiliencia encarnada”, inspirando a una Alemania que superó ausencias como la de Isaiah Hartenstein. Para España, es orgullo: primer técnico nacional en ganar Eurobasket. Álex Mumbrú no solo hizo historia con Alemania, sino que demostró que la pasión trasciende la salud. Su triunfo en el Eurobasket 2025, forjado en adversidad, lo posiciona como ejemplo para generaciones.