Boston Celtics vence por 43 puntos a unos Nets humillados

No hubo partido. Desde el salto inicial se vio venir la catástrofe. Boston Celtics pasó por encima de Brooklyn Nets como una apisonadora, sin piedad, haciendo el mayor daño posible, humillando al equipo del 'desaparecido' Jacque Vaughn hasta ganar 139-96, para ponerse 3-0 ante los Nets en el presente curso.

Jayson Tatum lideró la paliza con 31 puntos y 9 rebotes y Jaylen Brown le secundó con 26 puntos. Entre ambos, 14 triples anotados, 7 por cabeza.

Se les unieron en la fiesta Robert Williams III (16 puntos y 9 rebotes) y Derrick White (14 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias). El dominicano Al Horford firmó 9 puntos y 5 rebotes.

Todos ellos, sin excepción, sumaron todas sus cifras en los tres primeros cuartos, ya que descansaron en el último.

Es esta la victoria más imponente de los Celtics en una temporada cargada de victorias, una victoria fraguada a partir de un irreverente primer cuarto en el que Boston hizo lo que quiso con unos Nets inexistentes. ¡El 46-16 del primer cuarto lo dice todo! Un auténtico roto.

El arranque resultó demoledor. Boston se puso 14-3 y Vaughn pidió un tiempo muerto. Tras el tiempo, mate de Derrick White para empezar y triples y triples sin pausa para continual, hasta ponerse los Celtics 24-4 a mitad de primer cuarto y no detenerse nunca ante un Vaughn que decidió no parar más el juego y quedarse de miranda en el banquillo, sin interés alguno por parar un poco la sangría que estaba sufriendo su equipo. Dejó que los jugadores reaccionaran por sí mismos... y no hubo reacción alguna.

Boston metió sus primeros 8 intentos triples, un 8 de 8 que hizo temblar a una defensa visitante que lo mismo encajaba puntos a mansalva desde el perímetro que recibía puntos con suma facilidad desde la pintura. El rebote, por si fuera poco, era local. Nada podría ir mejor para Boston y peor para Brooklyn. El dúo Jayson Tatum-Jaylen Brown arrasaba en ataque, Robert Williams III dominaba las cercanías del aro y la paliza llegó a las primeras de cambio.

Al final del primer cuarto, ese increíble 46-16 ante el cual no se puede excusar Nets diciendo que jugaba sin Kevin Durant, Ben Simmons y T.J. Warren.

Unos Celtics sin Smart habían humillado a unos Nets de auténtico sonrojo. Boston metió 8 de sus 11 intentos triples en el primer cuarto, capturó 21 rebotes (6 ofensivos) por 6 del rival, solo perdió un balón y se dio un homenaje de los disfrutones disfrutones.

A partir de ahí todo el partido sobró. El segundo cuarto nos dejó la jugada que resume el partido. Al Horford metiendo un triple desde la esquina sin ningún rival en 5 metros a la redonda, y todo porque su marcador, el joven Sharpe, se puso a mirar al infinito cuando la jugada estaba en su costado del juego. Un despiste inadmisible que se hizo viral al momento de suceder.

Al descanso, 79-45, con Boston anotando 13 triples de 22 intentos, logrando 38 puntos en la pintura y arransando en el rebote. Con esos mimbres el cesto estaba hecho.

Los Celtics alcanzaron los 100 puntos a falta de más de 5 minutos para acabar el tercer cuarto, un cuarto que fue el último en el que jugaron los quintetos iniciales de ambos equipos. Terminó el cuarto 110-72, para dejar paso a un último período que sirvió simplemente para que en un momento dado el equipo local llegara a una máxima ventaja de 49 puntos.

Acabó Boston la noche con un 57,6% en el tiro y con 26 triples anotados, un auténtico bombardeo inmisericorde ante la vulgar defensa de Brooklyn, que tuvo en ataque a Kyrie Irving con 20 puntos y a Cam Thomas con 19.

La ausencia de Durant está siendo una travesía en el desierto para su equipo, que desde su lesión ya presente una marca de 4-7.