JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2021-2022

Regreso feliz y triunfal de Klay Thompson tras 941 días de espera

Warriors vence a Cleveland con 28 puntos de Curry y 17 de Thompson en 20 minutos de juego

Ángel Mustienes |

Noche más que especial en el Chase Center. Noche de profundas emociones en torno a Klay Thompson. Todo el foco en él, porque Klay regresaba del infierno, de estar 941 días sin jugar, de imaginar durante prácticamente 2 años y 7 meses su único sueño: volver a jugar al baloncesto.

Los aficionados de Warriors estaban entregados, y los ajenos a Warriors también. La presentación del jugador en el cinco titular del equipo ya tuvo una carga emocional indudable, con Steve Kerr conteniendo las lágrimas y con Draymond Green demostrando que las estadísticas poco importan cuando llegan trances como este.

Porque Draymond Green partió como titular pese a estar lesionado. Lo hizo de un modo simbólico, para alinearse de inicio junto a sus dos compañeros de aventura de largo recorrido, Stephen Curry y Klay Thompson. Green tenía que estar junto a Thompson en un momento así, y estuvo. Cometió una falta para detener el juego cuando habían transcurrido solo 7 segundos y dejó su plaza a Juan Toscano-Anderson para no volver a la pista en toda la noche.

Lo de Klay, mientras, fue inesperado por el excelente rendimiento que ofreció después de dos devastadoras lesiones y de dos temporadas en blanco. Tuvo minutos restringidos, pero fueron 20, que no está nada mal, gozando de más tiempo en el último cuarto. Su primera canasta no llegó desde el triple, sino a partir de una penetración, y fueron los 2 primeros puntos de su equipo. Luego, nos dejó 3 triples con su mecánica de tiro imprimiendo belleza al juego, hizo un mate apoteósico en el segundo cuarto que levantó aún más a la grada y provocó la sonrisa cómplice de Curry desde la banda y se condujo en defensa mejor de lo esperado.

Thompson hizo números impensables dadas las circuntancias: 17 puntos en 20 minutos, con 3 rebotes, 1 asistencia y 1 robo. Con alegría en pista y con serenidad encima de su bicicleta estática cada vez que era sustituido. Felicidad intensa a su alrededor. No es para menos.

Además, la noche le sirvió a Thompson para alcanzar los 12.000 puntos en su carrera y los 1.800 triples (21º en la lista histórica).

Se juntaron los Splash Brothers y Warriors funcionó bien sin Draymond Green, sobre todo en defensa. Stephen Curry lideró el triunfo (96-82) con 28 puntos, Jordan Poole hizo 14 ejerciendo de sexto hombre y Kevon Looney se dedicó con profusión a la intendencia con 6 puntos, 18 rebotes, 3 asistencias y 4 robos de balón.

Funcionaron razonablemente bien Andre Iguodala, Gary Payton II y Otto Porter Jr., mientras que Toscano-Anderson firmó 2 puntos, 4 rebotes y 3 asistencias en 19 minutos.

Con Green jugando 7 segundos simbólicos y Andrew Wiggins ofreciendo una noche gris, Warriors ganó con comodidad tras endosar en un momento del tercer cuarto un parcial de 19-3 a Cleveland que disparó el marcador hasta un rotundo 79-55, la máxima ventaja local en toda la noche.

A partir de ahí, Warriors aguantó como pudo la no rendición de Cavaliers, que llegó a ponerse 85-75 a 5:45 del final bajo la insistencia de Rajon Rondo. Pero la sangre no llegó al río, Golden State aguantó el empuje del equipo rival y Thompson fue sustituido a 2:41 del final bajo una atronadora ovación.

Warriors, que iguala a los Suns en la primera posición del Oeste con 30-9, no tuvo una noche feliz en el tiro, pero defendió a gran nivel, dominó el rebote y robó más balones que los que perdió, dándole esa doble condición exitosa en tableros y control del balón 22 tiros de campo extras frente a su rival (97 por 75).

Cleveland solo metió 7 triples, perdió 18 balones y tuvo como máximo anotador a Lamar Stevens con 17 puntos, lo que ya es un indicio de que las cosas no funcionaron bien para los de Bickerstaff.

Buen partido de Rajon Rondo, que sumó 15 puntos y 5 asistencias en 29 minutos con 3 triples sin fallo. Y se acabó. Porque no rindieron bien Darius Garland, Jarrett Allen, Evan Mobley y Kevin Love, y eso resultó demoledor para su equipo.

Al término del juego, todo era felicidad en el bando local. "Fue increíble tenerle en la pista", decía Curry en referencia a Thompson, y aún más increíble fue ver a Klay muy bien en el juego, mucho mejor de lo que podrían imaginar los más optimistas.