Denver domina a Miami con triple-doble y expulsión de Jokic

Uno en la vida puede hacer muchas buenas acciones. Pero con una muy mala que haga puede arruinarlo todo. Algo así le ha pasado a Nikola Jokic esta noche. Hizo un gran partido y su equipo jugó a grandísimo nivel. Logró el serbio un triple-doble. Venció Denver con claridad. Pero al final...

A veces hay que empezar por el final de un partido aunque ya estuviera por entonces decidido. No suele ser habitual. Pero el repaso ha de arrancar por aquello de lo que hoy se va a hablar más: la expulsión de Jokic.

El partido estaba 111-94 y quedaban 2:39. Todo estaba decidido. Entonces, un jugador toma la lamentable decisión de desentenderse del balón. Y hacer una falta dura a Jokic sin venir a cuento. Ese jugador es Markieff Morris. Un sospechoso habitual. Pero lo peor viene después. Al Joker se le va la pinza. Y no es la primera vez que le pasa. El ánimo caliente es un producto balcánico de primera necesidad. Por eso sale a flote cuando menos te lo esperas. Esta vez, Jokic se pasa de la raya. Agrede por la espalda a Morris violentamente. De forma peligrosa. Y Morris queda tendido en el suelo de muy mal modo. Aunque luego se marcha a vestuarios por su propio pie, afortunadamente. El susto no se lo quita nadie.

El resultado de todo ello: expulsiones de Morris y Jokic, y técnica para Jimmy Butler. Al serbio le va a caer una sanción sí o sí.

Aquí está la jugada en cuestión.

Más allá de esa desagradable acción-reacción, hubo partido y hubo dominio local. Sin Jamal Murray y Michael Porter Jr., Denver pasó por encima de Miami Heat. Victoria cómoda: 113-96. Los locales ganaron los tres primeros parciales para terminar el tercer cuarto con 21 de ventaja (91-70). Miami siempre fue a remolque. Nunca pudo. Nunca estuvo.

Los Nuggets se ponen 6-4. Y lo hacen con un trabajo defensivo notable. En 7 de los 10 partidos que han jugado dejaron al rival en menos de 100 puntos. Todo un dato.

En el partido, Denver ya tomó 17 de ventaja en el segundo cuarto. Y se fue al descanso venciendo 64-49. Solo Jimmy Butler ofrecía resistencia.

El tercer cuarto fue definitivamente matador para Miami. Mala defensa de Heat desde el principio del partido. Muchas pérdidas de balón. Atasco desde el triple. Jugadores clave en mal día. Jugadores como Kyle Lowry, Tyler Herro o Bam Adebayo no hicieron nada en la primera parte.

Denver fue feliz hasta la tristeza final por la acción de Jokic. El vigente MVP firmó un triple-doble: 25 puntos, 15 rebotes y 10 asistencias, con 10 de 14 en el tiro. Es un genio del juego y a veces tiene demasiado genio. También sobresalió Will Barton: 25 puntos, 6 asistencias y 7 de 9 desde el triple. Y en la segunda unidad el novato Hyland dejó fuera de juego al argentino Campazzo.

El ex del Real Madrid se cayó de la rotación. Jugó 1 minuto y 12 segundos. Ya cuando a nadie le importaba el partido. Cuando la grandeza y la tragedia del juego ya estaban en las redes sociales.

Butler fue el único jugador visitante destacable. Sumó 31 puntos y 8 asistencias. Adebayo hizo una mala primera parte. Herro estuvo mal. Y Lowry aún peor. El veterano base tuvo una noche para olvidar: 0 puntos con 0 de 8 en el lanzamiento.

Miami queda ahora con 7-3. Es un gran equipo que sigue conformando su juego. Algún accidente como este es posible. Pero parece tener un plan bien armado.