La última jornada del año dio para mucho a pesar de sólo contar con 6 partidos. En el bloque que nos ocupa, Miami ganó en la prórroga a Orlando para conservar el liderato gracias al partidazo de LeBron James y pese a la actuación delirante, en positivo, de Nikola Vucevic: ¡20 puntos y 29 rebotes!.
Además del duelo de los equipos de Florida, otros 2 datos llaman la atención. El primero, ¡el 30-5 que San Antonio endosó a Brooklyn en el tercer cuarto del partido que los enfrentó!. Victoria de Spurs por 104-73 en paseo triunfal. Gran final de 2012 para Manu Ginóbili y compañía. El segundo dato llamativo no fue otro que Charlotte Bobcats cortó su horrible racha de 18 partidos consecutivos perdidos ¡ganando en el United Center a Chicago Bulls!. Monumental sorpresa.
Miami sufre; LeBron y Vucevic sobresalen
Tras un buen primer cuarto, todo se le puso cuesta arriba a Miami Heat en el segundo, que acabó con un contundente 32-17 para unos Orlando Magic plagados de bajas, ya que a las ya consabidas de Glen Davis, Jameer Nelson y E'Twaun Moore, se unió la del mexicano Gustavo Ayón, que ya sólo pudo jugar 3 minutos en el partido anterior por problemas físicos. Ese 32-17 hizo que los locales remontaran y se fueran al descanso 54-48. A partir de ahí, la emoción no cesó. El tiempo reglamentario acabó con empate a 99 y los Heat terminaron ganando 110-112 para conservar el liderato de la Conferencia Este.
En tamaño desarrollo de partido, hubo 2 jugadores por encima del resto. El héroe final fue el local LeBron James, inmenso con sus 36 puntos, 8 rebotes y 11 asistencias, pero sobre todo inmenso por su forma de resolver el partido en la prórroga, en la que anotó 10 puntos, incluidos los 6 iniciales de su equipo y los 2 libres que dieron el triunfo a los suyos a 1 segundo del final (108-112 tras anotarlos).
Pero hubo otro héroe, aunque perdiera: Nikola Vucevic. Su partido cobró tintes épicos. Batió su marca personal en la NBA en anotación, 20 puntos, y logró el mejor registro de rebotes de la historia de una franquicia en la que han jugado, por ejemplo, ¡Shaquille O'Neal y Dwight Howard!. ¡¡¡Porque Vucevic capturó 29 rebotes!!!. Acabó así el bueno de Nikola Vucevic con 20 puntos, 29 rebotes y 3 robos en su noche soñada, que no acabó en triunfo soñado de milagro.
El partido pudo terminar en sus 48 minutos reglamentarios si bien Arron Afflalo o Chris Bosh hubieran acertado los tiros finales del cuarto cuarto. Pero al final, tuvo que ser el gran LeBron el que decidiera un encuentro en el que Miami precisó de su 'big four' hasta límites insospechados. Entre James, Chris Bosh (22 puntos), Dwyane Wade (21) y Ray Allen (17 y 4 robos) sumaron 96 de los 112 puntos de los Heat. Tremendo.
El gran dominio de Miami en el rebote lo equilibró Orlando perdiendo sólo 7 balones en 53 minutos y teniendo varios jugadores también a gran nivel. Además de la noche salvaje de Vucevic, Afflalo metió 28 puntos y J.J.Redick, 23 con 5 triples. Gustavo Ayón, lesionado, no jugó y el boricua Moe Harkless tampoco lo hizo, aunque éste por decisión técnica.
San Antonio 104 Brooklyn 73
¡Vaya manera de los Spurs de acabar el año!. Pegándole una soberana paliza a Brooklyn Nets y dándole en los morros de forma contundente al magnate ruso Mikhail Prokhorov. Porque en el primer compromiso serio de la etapa interina de P.J.Carlesimo llegó la debacle.
Una debacle que cobró su forma más destructiva en un alucinante tercer cuarto que todavía nos hace a todos frotarnos los ojos para comprobar que sucedió realmente lo que sucedió. Ese tercer cuarto arrancó con un gran Tiago Splitter y un salto entre dos que ganó Tony Parker a Reggie Evans y acabó con cesta sobre la bocina de Nando de Colo y un tremebundo 30-5 para San Antonio, que dejó a los Nets en un 2 de 20 en el tiro. Se trata de la menor cifra que los Spurs reciben en su historia en un tercer cuarto y del tercer peor ataque en un tercer cuarto en la historia de la NBA. Un dato increíble.
A partir de ahí, todo sobró. Tamaña exhibición, lógicamente, no pudo tener respuesta y los Nets deambularon por la pista pidiendo el final del partido, al que se llegó con 31 de ventaja para los locales y sólo 73 puntos anotados por los visitantes.
Mientras Brooklyn metía 5 puntos en ese tercer acto, hasta 7 jugadores de los Spurs anotaban con Tim Duncan y Tony Parker al frente. Fue un abuso. Un abuso que permitió que otra vez se repartieran enormemente los minutos y el descanso en las filas texanas.
En los Spurs (25-8 con un 13-2 en casa), Tony Parker fue el que más jugó, 26 minutos, y el que más anotó, 20 puntos. Tim Duncan hizo 15 y Nando de Colo fue el tercer anotador con 11 en 22 minutos. Buen quehacer de Manu Ginóbili, que en 20 minutos logró 8 puntos, 5 asistencias y 3 recuperaciones. San Antonio anotó el 59% de sus tiros.
En Brooklyn Nets, desastre de todas sus estrellas y ausencia de Gerald Wallace. Su máximo anotador, la mayor decepción hasta ahora de la temporada: MarShon Brooks. Hizo 16 puntos en 19 minutos. Mirza Teletovic dispuso de 10 minutos, pero fue improductivo.
Sorpresón en Chicago
Monumental sorpresa en el United Center, donde los Bulls ya no son lo que eran desde que les falta Derrick Rose. Monumental porque los Bobcats rompieron en el mítico pabellón de los Bulls su horrible racha de 18 derrotas consecutivas y lo hicieron sin poder contar con el número 2 del último draft, Michael Kidd-Gilchrist.
Victoria de Charlotte por 81-91 ante unos Bulls atascados durante todo el partido y especialmente torpes en el cuarto final. Chicago acabó con un 35% de acierto en el tiro de campo, un 25% desde el triple y con Joakim Noah firmando uno de los peores partidos que se le recuerda en la NBA. De nada sirvieron ni los 20 puntos y 12 rebotes de Luol Deng, ni los 19 y 14 de Carlos Boozer. Tampoco los buenos minutos de Richard Hamilton o de Taj Gibson. El fracaso fue colectivo.
Charlotte no ganaba desde el 24 de noviembre y el 31 de diciembre se permitió ganar a pesar de perder 18 balones y fallar 17 tiros libres. Kemba Walker fue el líder del equipo con un completo partido (18 puntos, 8 rebotes, 6 asistencias y 4 robos), Gerald Henderson metió 16 puntos y los suplentes Ramon Sessions y Ben Gordon, 15 cada uno. Además, Bismack Biyombo reboteó bien y Jeff Adrien proporcionó una agradable sorpresa.