Pocos finales tan caóticos como el que se ha podido ver esta noche en el Madison Square Garden. Y en ese caos, con una secuencia en la que en unos pocos segundos se perdieron 3 balones, ganaron los Knicks a los Pistons gracias a Josh Hart y a un error arbitral.
Knicks venció 113-111 con un omnipresente Hart, que en los últimos segundos anotó 3 libres, robó un balón y capturó 2 rebotes ofensivos, pero lo cierto es que la jugada interminable, caótica y deslucida, horrible en su desarrollo baloncestístico, que supuso en gran parte la definición del encuentro no tiene desperdicio. Aquí está el final del encuentro.
New York se impuso con 35 puntos y 12 asistencias de Jalen Brunson y grandes aportaciones de Donte DiVincenzo y sobre todo de Josh Hart, que declaró al final del partido: "Ganamos. Esto es la NBA. No nos importa cómo ganamos, no nos importa lo feo que haya sido". Y feo fue, tanto por el desbarajuste horrible de la jugada en la que se perdieron 3 balones como por el error arbitral en una de las acciones registradas en dicha secuencia.
Monty Williams no se cortó al final del partido. Auténtica rajada contra los árbitros, que reconocieron su error. Ese error se centra en la falta que no pitaron de Donte DiVincenzo a Ausar Thompson faltando 8,5 segundos para el final.
Destacar también en el apretado final del partido el taponazo que le puso Isaiah Hartenstein a Jalen Duren. Impresionante.
Detroit tuvo a Cade Cunningham con 32 puntos y 8 asistencias, muy bueno su duelo con Brunson, mientras que el ex Knick Quentin Grimes anotó 14 puntos en su visita al Madison, todos en el cuarto final.