El argentino Luis Scola, último jugador hispano que permanecía en liza en la actual temporada NBA, terminó anoche su participación en la presente temporada. Partió como titular, pero jugando solo 6 minutos y marchándose a casa sin anotar en la definitiva eliminación de su equipo, Toronto Raptors, que no fue rival para los Cavaliers en el 6º partido de las Finales del Este en las que se enfrentaban ambos equipos.
Scola finaliza así una temporada complicada pero exitosa y unos playoffs en los que su juego ha sido muy criticado por un sector de los aficionados de los Raptors y su participación en el equipo se ha visto notablemente reducida.
El jugador argentino había tenido una aportación sólida a lo largo de la temporada regular como titular con minutos limitados. Había jugado 76 partidos, siempre saliendo en el quinteto inicial, y promediado 8,7 puntos y 4,7 rebotes por encuentro en 21,5 minutos de juego por noche. Sin embargo, su final de curso no ha sido bueno.
Flojo rendimiento en playoffs y futuro incierto
En la fase final, el rendimiento de Scola bajó notablemente, tanto que Dwane Casey terminó eliminándolo de la rotación del equipo durante un buen número de partidos, si bien volvió a tener presencia en los últimos encuentros de la serie ante Cleveland.
En total, Scola estuvo en pista en 11 de los 20 partidos que los Raptors disputaron en playoffs, partiendo en 9 de ellos como titular. Sus minutos de juego se redujeron a algo menos de 13 y sus promedios, a 2,5 puntos y 1,6 rebotes con unos muy pobres porcentajes de tiro: 26% en el doble y 19% desde el triple.
Un final con sabor amargo para el gran jugador porteño, que acaba contrato y tendrá que plantearse su futuro este verano, en el que ejercerá de abanderado de Argentina en los Juegos de Río. A sus 36 años, habrá que ver qué ofertas le llegan en la NBA o desde Europa. Por ahora, no parece que en su cabeza haya planes de retirada.