LeBron James visitó su antigua casa, Miami, y se fue de ella con cara de pocos amigos porque Miami Heat dio todo un repaso deportivo en la cancha a unos decepcionantes Cleveland Cavaliers. El triunfo local fue incontestable: 122-101.
Sobró el cuarto final. Miami ya ganaba por un contundente 65-44 al descanso y dominaba por 28 puntos al finalizar el tercer cuarto.
Los locales arrasaron en el rebote (50 a 30) y presentaron un ataque demoledor ante un equipo que no defendió nada. Además, Miami presentó un gran 11 de 19 desde el triple y tuvo a 5 jugadores en 16 o más puntos.
Esos jugadores fueron Dwyane Wade (24 tantos), que superó la barrera de los 20.000 puntos, Goran Dragic (18 tantos y 11 asistencias) y Joe Johnson (18 con 4 triples), entre los titulares, y el novato Josh Richardson (19 puntos y 4 triples) y Hassan Whiteside (16 con 13 rebotes), entre los suplentes.
En Cleveland solo funcionó LeBron James, autor de 26 puntos en 27 minutos con un 65% en el tiro de campo. Eso sí, con él en pista su equipo encajó un parcial de 23 puntos en contra. Richard Jefferson hizo 20 tantos, Kyrie Irving estuvo discreto y Kevin Love, mal.