Palabras tranquilizadoras las que se han podido leer hoy en Twitter. Porque el entrenador de Miami Heat, Erik Spoelstra, ha asegurado que la vida del jugador Gerald Green no corre peligro. Eso sí, el misterio en torno a lo que le ha pasado a Green sigue sin esclarecerse.
"Estamos agradecidos por que (Gerald) esté sano y salvo ahora. Nuestros pensamientos están con él y con su familia". Ese ahora podría hacer pensar que ha habido algún momento de tensión en el que la vida de Green sí ha corrido peligro, pero nada se puede asegurar sobre ello dado el hermetismo existente en torno al caso.
Green fue hospitalizado ayer sin que se sepa la causa de su ingreso y sin que ni siquiera se haya dado a conocer el nombre del centro hospitalario en el que se halla.
Ha habido bastantes especulaciones, pero ningún medio estadounidense ha publicado cuál es el mal del jugador. Es más, nadie ni siquiera ha hablado de una posible causa. El misterio sigue, por lo tanto, sin resolverse.
Eso sí, las escuetas palabras de hoy mueven al optimismo sobre la salud de un jugador que había hecho una gran pretemporada y que había iniciado con buen pie la temporada regular.