Los Hawks se encontraron con demasiados obstáculos anoche en su intento de enderezar la eliminatoria ante Cleveland. La baja de Kyle Korver, la expulsión de Al Horford antes del descanso y la estelar actuación de LeBron James desembocaron en un emocionante final y una victoria de los Cavs, que no tuvieron a Kyrie Irving, que pone el 3-0 en la serie y deja a los de Ohio a un paso de la final.
Cleveland 114 Atlanta 111 (tras prórroga) (3-0)
Los Hawks tenían una tarea complicada en su visita a Cleveland en su intento por seguir con vida en estos playoffs tras haber perdido, como locales, los dos primeros enfrentamientos de su serie. Los de Atlanta no podían contar con Kyle Korver, pero su baja quedó rápidamente compensada al saberse que los Cavs no podrían contar con Kyrie Irving.
El partido empezó igualado y con un LeBron James poco afortunado que falló sus primeros 10 lanzamientos a canasta, algo que no le había ocurrido nunca a lo largo de su carrera. Se acercaba ya el descanso con ambos equipos prácticamente empatados cuando ocurrió una acción que resultaría decisiva, la expulsión de Al Horford.
Los árbitros decidieron expulsar al pívot dominicano a 34 segundos de llegar al descanso y tras una larga y tensa revisión de vídeo. Horford peleó con Matthew Dellavedova por un rebote, ambos terminaron cayendo -el base de los Cavs estuvo cerca de provocar una seria lesión de rodilla al dominicano lo que le costó una técnica- y el jugador de los Hawks terminó sobre el de los Cavs y golpeándole con el codo, sin alcanzarle la cara, un golpe que los árbitros consideraron intencionado. Una jugada confusa y muy discutible que supuso una flagrante 2 para Horford y su expulsión del partido.
Hasta entonces, Horford, 14 puntos y 4 rebotes en 19 minutos, había sido uno de los principales soportes de los Hawks y su ausencia pesó a los suyos. Además, LeBron, omnipresente, ya no fallaba y tomó las riendas de Cleveland en todos los terrenos, lo que permitió a los locales plantarse con 10 puntos de ventaja en los comienzos del último cuarto.
Los Hawks, sin embargo, bajo el mando de Jeff Teague, máximo anotador visitante con 30 puntos, se resistieron a rendirse. Los de Mike Budenholzer dieron la vuelta al partido y llegaron a estar 4 arriba (100-104) con minuto y medio sin jugar. Pero su falta de acierto en esos 90 segundos finales permitió a los Cavs igualar el marcador a 18 segundos del final sin que Teague fuera capaz de romper la igualdad sobre la bocina.
En la prórroga, con un LeBron exhausto que para entonces ya tenía en su casillero un espectacular triple-doble –terminaría con 37 puntos, 27 de ellos tras el descanso, 18 rebotes y 13 asistencias- y que cerca estuvo de pedir el cambio presa del agotamiento, los Cavs terminaron llevándose el encuentro.
Un triple desde la esquina de James a 36 segundos del final puso en ventaja a su equipo. A continuación, Teague falló y el propio LeBron aumentó a 3 puntos la ventaja. En la última posesión, Shelvin Mack tuvo tiempo de lanzar dos veces, la última de ellas completamente solo desde la esquina, intentando forzar la prórroga, pero no acertó en ninguna de ellas. Los Cavs se hacían con el partido y, salvo sorpresa mayúscula, todo apunta a que se enfrentarán a los Warriors en las Finales de la NBA.