La NBA perdió ayer a una de los jugadores estrella de sus primeros años. Slater Martin, 5 veces campeón de la NBA, 7 veces All-Star, 5 veces elegido en el segundo mejor equipo de la NBA y miembro del Salón de la Fama desde 1982, falleció en Houston a los 86 años tras una breve enfermedad.
Martin había nacido en 1925 en Elmina, un pequeño asentamiento al norte de Houston que desapareció del mapa en 1935, pocos años después de que un gran incendio arrasara el gran aserradero que ejercía de motor de la economía local y la crisis económica de la Gran Depresión hiciera el resto.
Trasladado a Houston con su familia, se enroló en la Universidad de Texas en 1943, pero no fue hasta 1949 cuando llegó a la NBA, tras servir varios años en la Armada estadounidense durante el final de la Segunda Guerra Mundial.
Jugó 11 temporadas como base en la liga, 7 de ellas en los Minneapolis Lakers, con los que ganó 4 títulos como base titular, y otras 4 en los St. Louis Hawks, con los que ganaría otro anillo en 1959, con un breve paso entre medias por los Knicks, con los que apenas llegó a disputar 13 partidos.
Rápido, fuerte y con un gran manejo de balón, Martin no era un gran anotador, pero era un jugador temido por sus rivales debido a su tenacidad defensiva. El gran base de los Celtics Bob Cousy no dudaba en asegurar que era el rival más duro al que se había enfrentado en su carrera y está considerado como uno de los más grandes defensores de la historia en su posición. Su número 22 fue retirado en Minneapolis, pero los Lakers lo siguieron utilizando al trasladarse a Los Ángeles, donde a su vez terminaría retirado tras vestirlo Elgin Baylor.